Ciclo A Domingo de la Sagrada Familia (ASAFA) Jesus, migrante

Antiguo Testamento y Nuevo Testamento se dan la mano hoy en nuestra oración. Aunque el salmo nos mente ese “temor” que tantas interpretaciones ha generado, el Niño que nos nace esta semana nos enseñará que al Abbá hay que hablarle con la confianza de un hijo que busca cobijo. Debemos rezar ese mismo salmo desde un entorno familiar, comunitario, abierto al misterio.

Lo que no tiene doblez es la figura emigrante de Jesús y los suyos, obligados a huir de su Tierra por causas de una persecución. Aquí la realidad abrumadora de las migraciones, teñidas en muerte, en tantas ocasiones, debería de golpearnos y abrirnos el corazón, para acercarnos a los que vienen a nuestra tierra buscando cobijo con la misma confianza que esperamos de ese Abbá.

Que la Navidad llene de felicidad nuestro corazón e ilumine con esperanza, amor y ganas de ser Jesús para los demás, el año que empieza…