Ciclo B Tiempo de Cuaresma 5 (BCUA05) ¡Si el grano de trigo cae en tierra y muere, da mucho fruto!

Jesús hoy nos dice que si el grano no cae en tierra y muere, queda infecundo, pero si muere, da mucho fruto. La frase es inquietante. Nos preguntamos ¿Sólo podremos dar fruto, muriendo?

Nuestra sociedad piensa que lo importante en la vida es vivir con salud, con éxito, con trabajo, con dinero, viviendo para disfrutar y para nosotros mismos. Sin embargo, cuando nos llegan los problemas, nuestra vida cambia, igual que nuestras prioridades y, entonces, nos damos cuenta de que lo importante en la vida no es el éxito o el trabajo, sino el amor a las personas que nos rodean y nos ayudan, vivir en paz, ser solidarios con los demás…

Así, si nuestra vida cambia, el tiempo lo dedicamos a las cosas que ahora consideramos importantes. Nuestra vida deja de ser mediocre y estéril y pasa a ser más humana, alegre, generosa, una vida que fructifica en los demás.

El grano de trigo, para liberar la vida que lleva dentro, tiene que entregarse, sólo de ese modo fructificará. No podemos ayudar a los demás, si no estamos dispuestos a desvivirnos por ellos. No podemos construir un mundo mejor, más humano, si sólo nos interesa nuestro bienestar. No podemos ser solidarios, si solo vivimos para nosotros mismos.

¿Qué riesgos estamos dispuestos a asumir, para dar vida y fructificar?…