Cada semana, unimos la Palabra y el canto para ayudar a profundizar en la Oración.
Los cascabeles nos llaman a la oración y nos recuerdan la Alegría del Evangelio.

2018/04/04

Ciclo B Tiempo de Pascua (BPAS02)
Señor mío y Dios mío

Aunque el apóstol Tomás fue testigo excepcional de la resurrección, ha pasado a la historia como ‘el incrédulo’. Sin embargo…

...Cuando Jesús decidió ir a Betania a resucitar a Lázaro, acercándose peligrosamente a Jerusalén, Tomás dijo “Vayamos también nosotros a morir con él” En la Ultima Cena cuando Jesús predice su muerte, su nivel de comprensión es más bajo porque le dice que no saben a donde va y da pie a la célebre respuesta: “Yo soy el camino, la verdad y la vida”. Es a Tomás a quien se le hace la revelación. Y llegamos a la escena de la incredulidad de Tomás después de la Pascua. Tomás vió, tocó e hizo una confesión de fe remarcable: Señor mío y Dios mío.

Tomás es importante porque nos conforta en nuestras inseguridades, porque nos demuestra que toda duda puede tener un final luminoso y porque nos recuerda el auténtico sentido de la fe madura que nos alienta a continuar, a pesar de las dificultades, por el camino de la fidelidad.
(Del Papa Benedicto XVI, Audiencia General, 27-9-2006).


http://www.mediafire.com/file/4d0nnob59omoe88

No hay comentarios:

Publicar un comentario